Ir de visita a PeeRRe es una montaña rusa de emociones. Te motivas porque veras a tu seres amados y te motiva darte esa cerveza buen fria que por alguna razón en tu país te sabe mejor. Pero cuando nos toca partir ahi es que duele.
Es la segunda vez que voy PR desde que me mude a Carolina del Norte y esta vez me dio mas duro la realidad. Llegue al pueblito de ciales y vi ese bello muro cerca de “pollos necos” con un “Kira Ridicula” pintado con spray. Ahi me pregunte “ yo de verdad extraño esta mierda?”
No es hasta el día que nos toca irnos que nos damos cuenta lo afortunados que somos. Afortunados de tener personas que por esa semana que vas a estar pongan en pausa todas sus rutinas solo porque quieren pasar el tiempo contigo.
Cuando vas por ese camino que se hace bien cortito cuando te vas de tu país comienzas a tragar gordo sin mirar a la persona que te esta llevando ya que siempre se te quedan mirando con la pena de como si fuesen a poner a dormir el perro de la familia. Luego en el camino te vas recordando de ese primer mes de cuando llegaste a la estadidad. Recuerdas esa soledad y ese sentimiento que te hace sentir el pecho mas pesao que el pikete de Arcangel. Ahi es que la situacion se pone compleja.
Te entra la duda de “puñeta ¿me debo quedar?”pero en el fondo sabes que la contestación es “no” debido a la situación de cada persona. Sabes que aunque quieras no podras vivir en el pais que tanto amas y con las personas que siempre quisieras tener a tu lado. Asi que solo toca despedirse y sin tan solo poder dar un abrazo decirles un “hasta pronto”.
Mi PeeRRe 🇵🇷 